HUMATROPE

ELI LILLY

Somatotropina

Hormonoter�picos : Hipofisarias Hipotal�micas

Indicaciones: Indicaciones pedi�tricas: la somatropina est� indicada en el tratamiento a largo plazo de ni�os con crecimiento deficiente debido a secreci�n inadecuada de hormona de crecimiento end�gena. La somatropina tambi�n est� indicada para el tratamiento de la estatura peque�a del s�ndrome de Turner.
Propiedades: Farmacolog�a cl�nica: Crecimiento lineal: la somatropina estimula el crecimiento lineal: (1) en ni�os con deficiencia de la hormona de crecimiento end�gena normal, y (2) en ni�os con estatura corta en asociaci�n con s�ndrome de Turner. Los ensayos precl�nicos in vitro y cl�nicos han demostrado que la somatropina es terap�uticamente equivalente a la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario y logra perfiles farmacocin�ticos equivalentes en adultos normales. El tratamiento de ni�os con deficiencia de la hormona de crecimiento con somatropina aumenta el grado del crecimiento y las concentraciones de IGF-1 (factor de crecimiento insulino-similar/Somatomedin-C) similar a lo observado despu�s del tratamiento con la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario. Las otras acciones que han sido demostradas con la somatropina y/o la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario son las siguientes: Crecimiento de los tejidos: Crecimiento esquel�tico: la somatropina estimula el crecimiento esquel�tico en pacientes con deficiencia de la hormona de crecimiento. El aumento moderado de la longitud corporal despu�s de la administraci�n, ya sea de la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario o de la somatropina, es el resultado de un efecto sobre las placas del crecimiento de los huesos largos. Las concentraciones de IGF-1 las que pueden tener un papel en el crecimiento esquel�tico son bajas en el suero de ni�os con deficiencia de la hormona de crecimiento, pero aumentan durante el tratamiento con la somatropina. Tambi�n se observaron elevaciones de las concentraciones s�ricas promedio de fosfatasa alcalina. Crecimiento celular: se ha demostrado que hay menos c�lulas m�sculo-esquel�ticas en ni�os de baja estatura que sufren de deficiencia de la hormona de crecimiento end�gena, en comparaci�n con ni�os normales. El tratamiento con la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario tiene como resultado un aumento tanto del n�mero como del tama�o de las c�lulas musculares. Metabolismo prote�nico: el crecimiento lineal se facilita en parte por un incremento en la s�ntesis de prote�na celular. La retenci�n de nitr�geno es demostrada por una disminuci�n de la excreci�n urinaria de nitr�geno y del nitr�geno ureico s�rico despu�s de iniciar el tratamiento con la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario. El tratamiento con la somatropina tiene como resultado una disminuci�n similar en el nitr�geno ureico s�rico. Metabolismo hidrocarbonado: los ni�os con hipopituitarismo a veces experimentan hipoglucemia en ayuno, la cual mejora con el tratamiento con somatropina. Las dosis altas de la hormona de crecimiento humana pueden afectar la tolerancia a la glucosa. Pacientes no tratados con s�ndrome de Turner tienen un aumento de la incidencia de la intolerancia a la glucosa. La administraci�n de hormona de crecimiento a estos pacientes o a adultos normales produce un aumento en el nivel promedio basal de insulina en ayunas y post-prandial aunque esos valores medios permanecen en rango normal. Metabolismo de los l�pidos: en pacientes con deficiencia de la hormona de crecimiento, la administraci�n de la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario ha tenido como resultado una movilizaci�n de los l�pidos, reducci�n de las reservas de grasa del organismo y aumento de los �cidos grasos plasm�ticos. Metabolismo mineral: la retenci�n de sodio, potasio y f�sforo es inducida por la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario. Las concentraciones s�ricas de fosfato inorg�nico aumentaron en pacientes con deficiencia de la hormona de crecimiento despu�s de la terapia con somatropina o la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario. El calcio s�rico no es alterado significativamente en pacientes tratados con la hormona de crecimiento humana de origen hipofisario o con la somatropina. Propiedades farmacocin�ticas: la biodisponibilidad de la somatropina es la misma si se presenta en viales o cartridges. Una dosis de 100 mcg/kg a un adulto voluntario hombre producir� un pico s�rico (Cm�x) de aproximadamente 55 ng/ml, una vida media (t �) de cerca de 4 horas y una absorci�n m�xima (AUC (0-) de aproximadamente 475 ng*h/ml.
Posolog�a: La dosis y el esquema de administraci�n para la somatropina deben ser personalizados para cada individuo. Las siguientes corresponden a las posolog�as aprobadas: Pacientes pedi�tricos con deficiencia de hormona de crecimiento: la dosis recomendada es: Ni�os: 0.5-0.7 U.I./kg (0.18-0.3 mg/kg) de peso corporal por semana. Esta dosis semanal deber�a dividirse en 6-7 inyecciones subcut�neas. La inyecci�n I.M. tambi�n es aceptable. Tratamiento de la talla baja del s�ndrome de Turner: la dosis recomenda es 0.17 mg/kg- 0.375 mg/kg (0.5 deber�a ser dividida en 6-U.I./kg-1.125 U.I./kg) por semana. Esta dosis semanal deber�a ser dividida en 6-7 inyecciones subcut�neas administradas preferentemente al anochecer. La dosis y esquema deben ser individualizados para cada paciente. Terapia sustitutiva hormonal de hormona de crecimiento en pacientes adultos: la dosis recomendada para iniciar el tratamiento es 0.04 mg/kg (0.125 U.I./kg) por semana administrada en inyecci�n subcut�nea diaria. La dosis debe incrementarse gradualmente de acuerdo a los requerimientos individuales del paciente hasta un m�ximo de 0.08 mg/kg ( 0.25 U.I/kg) por semana. La titulaci�n est� basada en los efectos colaterales del paciente as� como en la determinaci�n de niveles s�ricos de IGF1. Los requerimientos pueden disminuir con la edad. Pacientes prep�beres con insuficiencia renal: la dosis recomendada es 0.045 mg/kg-0.050 mg/kg ( aproximadamente 0.14 U.I. /kg) de peso corporal por d�a administrada por v�a subcutan�a. Instrucciones para la administraci�n: la v�a de administraci�n debe ser por inyecci�n subcut�nea o I.M. El diluyente debe inyectarse en el frasco de somatropina dirigiendo el chorro de l�quido contra la pared del frasco. Despu�s de la reconstituci�n, al frasco debe impart�rsele un suave movimiento giratorio hasta que el contenido se haya disuelto por completo. No agitar. La soluci�n resultante debe estar clara y libre de part�culas. Si la soluci�n est� turbia o si contiene part�culas, el contenido no debe inyectarse. Antes y despu�s de la inyecci�n debe limpiarse el tabique del frasco con alcohol para friccionar u otra soluci�n alcoh�lica antis�ptica para evitar la contaminaci�n del contenido con las repetidas inserciones de la aguja. Administraci�n con jeringas: deben usarse jeringas y/o agujas est�riles desechables para administrar la somatropina. El volumen de la jeringa debe ser peque�o, lo suficiente como para extraer del frasco la dosis prescrita con exactitud razonable.
Efectos Colaterales: En aproximadamente el 2% de los 481 pacientes con deficiencia de la hormona de crecimiento, no tratados y previamente tratados en los estudios cl�nicos con somatropina, desarrollaron anticuerpos a la hormona de crecimiento, demostrado por una determinaci�n de la capacidad de uni�n de inicio mayor de 0.02 mcg/ml. No obstante, estos pacientes tuvieron aumentos en el crecimiento lineal as� como otros efectos saludables de somatropina y no experimentaron ning�n efecto adverso inusual. Aunque han sido observados anticuerpos limitantes del crecimiento con otras preparaciones de hormona de crecimiento, (inclusive productos de origen hipofisario), los anticuerpos en los pacientes tratados con somatropina no han limitado el crecimiento. En este momento se desconocen las implicaciones a largo plazo del desarrollo de anticuerpos. En el 4.7% de los 232 pacientes, algunos no tratados con anterioridad y otros previamente tratados por deficiencia de hormona de crecimiento en los estudios cl�nicos, que recibieron somatropina durante 6 meses o m�s, se encontr� fijaci�n s�rica de la hormona de crecimiento radiomarcada en exceso correspondiente al doble de la uni�n observada en el control, cuando las muestras s�ricas fueron ensayadas a una diluci�n 1:10. En el 6.9% de los 160 pacientes de este grupo que no hab�an recibido tratamiento previo hubo uni�n s�rica positiva. En comparaci�n, el 74.5% de otros 106 pacientes que tampoco hab�an recibido tratamiento previo y que fueron tratados durante 6 meses o m�s con somatren (producido por Lilly) en un estudio cl�nico similar, hubo uni�n s�rica de hormona de crecimiento radiomarcada de al menos 2 veces de aquella observada en el control. En estudios de s�ndrome de Turner donde fueron utilizadas dosis m�s altas de somatropina, m�s del 8% de los pacientes desarrollaron anticuerpos a la hormona de crecimiento seg�n esta definici�n. Adem�s de una evaluaci�n del cumplimiento con el programa de tratamiento y del estado de la gl�ndula tiroidea, en cualquier paciente que no responda al tratamiento deben efectuarse pruebas de anticuerpos a la hormona de crecimiento humana. Los siguientes eventos tuvieron lugar infrecuentemente en estudios cl�nicos en los que se administraron dosis altas de somatropina a voluntarios adultos sanos: cefalea, dolor muscular localizado, debilidad, hiperglicemia leve y glucosuria. En estudios con ni�os deficientes de hormona de crecimiento, se report� con poca frecuencia dolor en el sitio de inyecci�n. Se observ� un edema leve y pasajero en 2.5% de los pacientes a principios del curso del tratamiento. Ver Tabla
Contraindicaciones: La somatropina no debe usarse en sujetos con evidencia de cualquier actividad tumoral. Las lesiones intracraneales deben estar inactivas y el tratamiento antitumoral debe haberse completado antes de instituir el tratamiento. La administraci�n de somatropina debe suspenderse si hay evidencia de crecimiento tumoral. La somatropina no debe ser reconstituida con el diluyente para somatropina proporcionado en los pacientes con sensibilidad conocida al m-cresol o a la glicerina. La somatropina no debe ser utilizada para promover el crecimiento en ni�os con ep�fisis cerradas. Aquellos sujetos que en edad pedi�trica hab�an sido tratados con hormona de crecimiento durante su infancia hasta que fue obtenida la altura final deben ser reevaluados para determinar deficiencia de hormona de crecimiento despu�s del cierre de las ep�fisis y antes de comenzar la terapia de reemplazo a las dosis recomendadas para los adultos. La hormona de crecimiento no debiera ser iniciada para tratar pacientes con enfermedades cr�ticas agudas que siguen a cirug�a abdominal o coraz�n abierto, trauma m�ltiple o pacientes que tienen falla respiratoria.
Advertencias: En caso de hipersensibilidad al diluyente, los frascos pueden reconstituirse con agua est�ril para inyecci�n, USP. Cuando la somatropina se reconstituye de esta manera usar �nicamente una dosis reconstituida por frasco, refrigerar la soluci�n (2� a 8�C) si no se usa inmediatamente despu�s de la reconstituci�n, usar la dosis reconstituida dentro de 24 horas y desechar la porci�n no usada. Si ocurriese sensibilidad al diluyente, los viales deben reconstituirse con agua bacteriost�tica para inyecci�n USP. Cuando la somatropina se usa con agua bacteriost�tica (preservada con benzyl alcohol), la soluci�n debe mantenerse refrigerada a 2-8�C (36-46�F) y usada dentro de 14 d�as. El benzyl alcohol como preservativo en agua para inyecci�n bacteriost�tica no debe usarse en reci�n nacidos. Los efectos de la hormona de crecimiento durante la recuperaci�n fueron estudiados en 522 adultos cr�ticamente enfermos por cirug�a abdominal o card�aca, politraumatizados o falla respiratoria aguda, en 2 estudios cl�nicos placebo control. La mortalidad fue m�s alta (41.9% vs 19.3%) entre los pacientes que recibieron somatropina. La seguridad de esta droga en pacientes cr�ticos no ha sido establecida. Por lo tanto, el beneficio potencial de la continuaci�n de tratamiento en pacientes que tienen una enfermedad cr�ticamente aguda deber�a ser evaluada en relaci�n al riesgo potencial.
Precauciones: El tratamiento con somatropina debe ser dirigido por m�dicos con experiencia en el diagn�stico y tratamiento de pacientes con deficiencia de la hormona de crecimiento. Cierre de la ep�fisis: pacientes pedi�tricos que han sido tratados con hormona de crecimiento durante la ni�ez hasta alcanzar la altura final deber�an ser reevaluados en el d�ficit de hormona de crecimiento despu�s del cierre epifisiario y antes de iniciar la terapia con dosis de adultos. Lesi�n intracraneal: pacientes con d�ficit de hormona de crecimiento secundaria a lesi�n intracraneal debieran ser examinados frecuentemente por la progresi�n o recurrencia de la enfermedad subyacente. Hipertensi�n intracraneal: en casos de severa o recurrente cefalea, problemas visuales, n�usea y/o v�mitos, se recomienda hacer un fondo de ojo buscando edema de papila. Si �ste es confirmado, el diagn�stico de hipertensi�n intracraneal benigna debiera ser considerado y, si es apropiado, la hormona de crecimiento deber�a ser discontinuada. Deslizamiento epifisiario: los pacientes con des�rdenes endocrinos, incluyendo deficiencia de hormona de crecimiento, pueden desarrollar deslizamiento de ep�fisis femoral m�s frecuentemente. Cualquier ni�o con comienzo de cojera durante la terapia con hormona de crecimiento debe ser evaluado. Hipopituitarismo/hipotiroidismo: en pacientes con panhipopituitarismos, el reemplazo hormonal est�ndar deber� ser estrechamente monitorizado cuando la terapia con somatropina es administrada. Diabetes mellitus: como la hormona de crecimiento humana puede inducir un estado de resistencia a la insulina, los pacientes deben examinarse en cuanto a evidencia de intolerancia a la glucosa. Los ni�os con diabetes deben monitorizarse estrechamente durante el tratamiento con somatropina, lo cual puede requerir un aumento de la dosis de insulina. Insuficiencia renal cr�nica: antes de empezar el tratamiento con hormona de crecimiento para el retardo secundario a insuficiencia renal cr�nica, los pacientes deben ser seguidos durante un a�o para verificar la alteraci�n del crecimiento. El tratamiento conservador para la insuficiencia renal debe ser mantenido durante el tratamiento. El tratamiento con somatropina deber�a ser suspendido al momento del trasplante. Vejez: no hay experiencia en pacientes mayores de 60 a�os. Tratamiento prolongado: no existe experiencia del uso prolongado en adultos. Leucemia: se ha reportado leucemia en un peque�o n�mero de ni�os que hab�an sido tratados con hormona del crecimiento de origen pituitario as� como de origen ADN recombinante. La relaci�n contin�a siendo incierta. Si se inyecta por v�a subcut�nea, es preciso alternar los sitios de inyecci�n para reducir al m�nimo el riesgo de que ocurra lipoatrofia.
Interacciones Medicamentosas: Interacci�n con otros medicamentos y otras formas de interacci�n: debido a que la hormona puede inducir un estado de resistencia, los pacientes deber�an ser monitorizados para investigar intolerancia a la glucosa. La terapia excesiva con corticoides puede prevenir respuesta �ptima a la somatropina. Si la terapia de reemplazo se requiere, la dosis y adhesividad a los glucocorticoides debe ser cuidadosamente monitorizada para evitar ya sea insuficiencia adrenal o inhibici�n del efecto promotor del crecimiento. Carcinog�nesis, mutag�nesis, deterioro de la fertilidad: no se han realizado estudios a largo plazo en animales para determinar carcinogenicidad y deterioro de la fertilidad con esta hormona de crecimiento humana (somatropina). Hasta la fecha no ha habido evidencia de mutagenicidad inducida por somatropina. Uso durante el embarazo: Embarazo categor�a C: no se han efectuado estudios de reproducci�n con somatropina. Se desconoce si la somatropina puede ocasionar da�o al feto si se administra a una mujer embarazada o si puede afectar la capacidad de reproducci�n. La somatropina se debe administrar a una mujer embarazada s�lo en casos estrictamente necesarios. Uso durante la lactancia: no se han llevado a cabo estudios con somatropina en mujeres lactantes. Se desconoce si este medicamento se excreta en la lecha humana. Debido a que muchos medicamentos se excretan en la leche humana, es preciso proceder con cautela al administrar somatropina a una mujer lactante.
Sobredosificaci�n: La sobredosis aguda puede conducir inicialmente a la hipoglicemia y subsecuentemente a la hiperglicemia. La sobredosis a largo plazo puede tener como resultado signos y s�ntomas de gigantismo/acromegalia que concuerdan con los efectos conocidos de un exceso de la hormona de crecimiento humana.
Conservaci�n: Antes de la reconstituci�n: la somatropina as� como el diluyente para la somatropina deben refrigerarse a una temperatura entre 2� y 8� C. Ev�tese la congelaci�n del diluyente para la somatropina. Las fechas de caducidad est�n impresas en las etiquetas. Despu�s de la reconstituci�n: la somatropina es estable hasta por 14 d�as cuando la reconstituci�n se hace con el diluyente para la somatropina y se conserva bajo refrigeraci�n entre 2� y 8� C. Ev�tese la congelaci�n del frasco de somatropina reconstituida.
Presentaciones: Inyectable 4 U.I.: envase conteniendo 1 frasco-ampolla con polvo liofilizado y 1 frasco con 2 ml de diluyente.